Texto publicado originalmente en el flog de La Cobo:
Un día decides estudiar audiovisuales, porque sí, porque mola, porque mientras tus amigos del cole se meten en complicadísimas carreras, tú prefieres pasarte el día viendo peliculillas.
Una vez te metes ves que para resultar interesante no vale con hablar de la última peli de estreno. Así que te diriges a la óptica más cercana, te compras unas gafas de pasta negras, aunque no tengas problemas de vista, te haces socio del Video Instan y alquilas aquellas películas que sabes que sólo el hecho de verlas (qué coño, de alquilarlas) hará que todos te miren de un modo diferente.
Así que vas a la estantería que te cuesta la hostia encontrarla porque nunca antes la habías buscado y coges, al azar, cualquier película. Cualquier película sí, pero no de cualquiera, no, del director del que todos hablan mientras se acarician el mentón: de GODARD.
Y llegas a casa sabiendo que sólo por como te ha mirado la dependienta del Instan ya tienes la I de intelectual. Y les dices a tus padres que por favor no te molesten que vas a ver una pelicula de la Nouvelle Vague y que eso requiere silencio así que por favor bajen el volumen de la tele del salón donde están viendo la reposición de "Verano azul". Serie a la que, por supuesto, estás enganchado pero reconocerlo no sólo te quitaria la I ganada con el alquiler de la peli sino que sería una dura losa que sólo podrías quitarte de encima alquilando no sólo las pelis de Godard sino las de toda la panda de franceses de la Nouvelle Vague, y claro, uno quiere pasar por intelectual pero no por gilipollas.
Así que pones la peli, en versión original claro está, eso ya te de la N y rezas para que aquello no dure más de hora y poco, porque los colegas, y no los de audiovisuales precisamente, van a empezar a llamar y lo de las pelis de franceses no es lo mismo para ellos ;) y van a querer que se la pases y vamos que...
Al final te pones a ello y empieza la peli y ves una niña mona con camiseta de rayas y un tío mono con traje y van en coche y ahora les ves del lado derecho y ahora del izquierdo y ahora ya no les ves y ahora les vuelves a ver y ahora decides parar eso o acabarás cogiendo tu también la pistola que está en la guantera de ese coche y pegandote un tiro.
Y POR FIN suena el teléfono y es uno de los colegas de siempre y te vas a tomar una caña con él y te pregunta qué coño has hecho por la tarde y tú sólo puedes balbucear... PUTO GODARD.
lunes, 29 de octubre de 2007
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